Thursday, April 17, 2008

Hacia Salamanca

Más que todo, la mayoría de gente conoce de Salamanca por su famosa universidad. Como es una ciudad muy chiquito, la universidad y las catedrales dominan el paisaje. (También estábamos ansiosos por ir a Salamanca por que nos dijeron que la vida nocturna era tan buena como hay tantos estudiantes y turistas)

Al llegar a la ciudad, nos dimos cuenta que hotel en donde nos íbamos a quedar estaba al otro lado del río Tormes, un poco a las afueras de la ciudad. Al principio no nos sonó bien la idea. Como solo íbamos a caminar, y no a tomar taxis, preferíamos quedarnos más cerca del centro. Al final, resulto ser una buena idea porque nos dio el chance de caminar por el río y el parque a su alrededor, y también un ambiente perfecto para irnos a dormir cuando regresáramos esa noche de las discotecas.

Ya paseando por la ciudad dimos con la plaza mayor. A mi me pareció mejor que la de la Madrid porque habían muchos mas cafés alrededor de ella, y mas gente (principalmente estudiantes) sentados por todos lados relajándose. Como dice el refrán “When in Rome…” copiamos al resto de gente y compramos bocadillos y coca cola, y nos sentamos en círculo para ver a la gente pasar.

Después caminamos hacia la universidad, pero antes de llegar dimos con la casa de las conchas. Como pueden ver en la foto, los ciudadanos y turistas le han dado este nombre por la decoración usada en su fachada principal. De cerca es muy chévere verla como es tan diferente al resto de edificios de la pequeña ciudad.

Al llegar a la universidad, ya estábamos un poco cansados por lo que no nos quedamos mucho tiempo. La universidad de Salamanca fue uno de los principales lugares de estudios por casi 400 años y es la universidad más vieja en España. Como en viejos tiempos, todavía le llegan muchos estudiantes extranjeros. Hay muchos estudiantes Americanos que toman parte en la matriculación del verano. Aunque habían salones donde no estábamos permitidos entrar, lo que si pudimos ver nos gusto mucho. El estilo era muy bonito y se notaba su antigüedad. Pero como nos tocaba regresar a pie al Hotel para tomar la siesta, nos toco irnos un poco rápido.

Esa noche no tuvimos ningún problema para encontrar lugares para salir. Como la ciudad esta llena de estudiantes, al revés, los lugares sobraban. Lo que faltaba era encontrar un lugar bueno. Al final entramos en un lugar de “minis,” que son envases de un litro llenos de cervezas, y después a una discoteca para bailar toda la noche. (Todavía no compara con algunos lugares en Madrid, no se me ha olvidado contarles). Temprano el día siguiente nos toco coger el tren para irnos de vuelta a Madrid. Resulto un fin de semana muy divertido y a la vez instructivo.

No comments: